Después de una larga trayectoria en el trabajo por el Medio Ambiente, el curso pasado nos unimos a este proyecto de las escuelas Unesco.
A lo largo del año desarrollamos nuevas actividades y continuamos con las que llevamos haciendo años:
- Repoblación del monte de San Juan, llevamos plantando más de 25 años.
- Control de fugas energéticas diario.
- Patrulla ecológica durante los recreos.
- Huerto escolar.
- Jardín aromático y arbolado.
- Salida y limpieza de las riberas del río Gállego.
- Reciclado de materiales.
- Recogida selectiva para el reciclaje.
- Comisión de alumnos de Medio Ambiente.
- Comisión de Medio ambiente de docentes.
En el curso 2018-2019 centramos nuestros esfuerzos en la reducción de plásticos, haciendo especial hincapié en la reducción de plásticos de un solo uso. Para ello se actuó en varias vertientes:
- Alumnado: concienciación de los peligros que entraña el abuso del plástico, mediante una charla impartida por los alumnos de 6º EP. De esta charla surgieron ideas como escribir a diferentes empresas y supermercados para expresar nuestra preocupación, de ello se ocuparon los alumnos de 5º EP. Los más pequeños realizaron la cartelería y talleres con material reciclado. Redacción de un Manifiesto con nuestros compromisos.
- Familias: concienciación para conseguir una reducción efectiva en los almuerzos (fiambreras y botellas reutilizables que no estén hechas de PET1); en las celebraciones de cumpleaños (no se admiten retractilados ni tetrabricks individuales).
- AMPA: uso de vajilla de cartón o similar en las celebraciones.
Y, por supuesto, recibimos la visita de Plastiquín.
Le dimos la bienvenida.
Hicimos un mural mostrando que un pez de plástico puede convertirse en un pez de esperanza.
Recogimos nuestras preocupaciones y compromisos en un Manifiesto.
Hicimos carteles.
Participamos en talleres.
Escribimos cartas a los suoermercados y nos contestaron.
Dimos una charla de concienciación.
Propusimos a las familias reducir el uso de plástico de un solo uso en los almuerzos
Fuimos al río Gállego a limpiar.
Y despedimos a Plastiquín con un regalo nuevo: una bolsita, que cosimos nosotros, llena de hierbas aromáticas de nuestro jardín.