Uno de los recursos creativos que Gianni Rodari, el maestro italiano autor de la Gramática de la Fantasía, proponía como liberador de la imaginación era el emparejamiento de las palabras en binomios fantásticos, es decir, en asociaciones aparentemente absurdas o sin sentido. 

Nosotros le hemos propuesto esta técnica a nuestros alumnos de español de segunda media, ofreciéndoles una oportunidad de aprendizaje diferente, más allá de las clases convencionales. Para que entendieran el mecanismo les hemos presentado, a modo de ejemplo, el binomio fantástico con el que Rodari ilustra este mecanismo de creación en su Gramática: PERRO - ARMARIO. Y les lanzamos las siguientes preguntas: ¿Qué te sugieren estas palabras? ¿Puedes imaginar una historia para relacionarlas? Nuestros estudiantes enseguida empiezan a imaginar: En una gran ciudad vive una señora mayor. Esta señora tiene un perro, es un perrito de compañía. La señora vive sola y su casa no es muy grande. El perro vive en el armario, porque casa de la señora es un piso y no tiene balcones. El perro vive en el armario de la entrada, entre los abrigos y los zapatos. Cuando la señora sale a pasear con sus amigas y hace frío, se "viste" con el perro, se lo pone  como bufanda o "pelliccia"... Al perro le gusta mucho salir a pasear "encima" de la señora, porque es pequeño y desde arriba las cosas son diferentes...

Entendido el mecanismo, nuestros alumnos se lanzan a buscar binomios fantásticos... Lo hacen utilizando diccionarios bilingües italiano-español, que abren de manera casual con la ayuda de una regla. Van anotando las parejas: PÓMULO - REVISTA, ÁTOMO - EBRIO, PARQUE - DESAFÍO, ELIPSE - DEFINICIÓN, CABALLERO - ACENTUACIÓN, TOGA - HERIDA, EMBESTIR - ÁNGEL... Hay que elegir uno de estos binomios. Les invitamos a pensar en las posibilidades que ofrecen como punto de partida para una historia. Al final, eligen ÁTOMO - EBRIO.

La historia que empiezan a imaginar es la siguiente: Esta es la historia de un científico enamorado. El científico trabaja como físico nuclear. Está triste y deprimido porque está enamorado de una mujer que no le corresponde, no le ama. Un día el científico no puede soportar su soledad y bebe mucho. Bebe y bebe en su laboratorio y llora. Una lágrima contamina contamina uno de los experimentos atómicos del científico. El átomo reacciona de manera extraña...

Llegados a este punto, ampliamos la participación en la historia. En otra clase de segunda media presentamos el binomio elegido, así como el nudo original que la primera clase ha planteado. En esta ocasión les pedimos a los alumnos que profundicen en el mecanismo de la EVOCACIÓN, también propuesto por Rodari en su Gramática. Evocar, tal como lo entiende Rodari, es como lanzar piedras en el estanque de nuestra mente para que las ideas fluyan o emerjan a partir de nuestra idea originaria. Les proponemos a nuestros estudiantes que pongan en práctica esta técnica y le den forma de mandala, de dibujo más o menos geométrico, más o menos concéntrico... Una forma de expresión que recuerda a este acto evocativo que propone Rodari.

El resultado es este que podéis ver en el archivo adjunto. Una participación entusiasta y una historia que que empieza a construirse ya de manera interactiva en las redes sociales.

Aquí puedes acceder al archivo completo en formato pdf

 

 

 

Como conclusión a esta primera fase, hemos suministrado a nuestros alumnos un cuestionario de autoevaluacíón y les hemos otorgado una insignia que premia su participación en esta primera fase del proyecto.

Puedes visionar una copia del formulario completo pinchando aquí: http://goo.gl/forms/7XufjToY2tK8aMsy2